Hoy es el primer día de las fiestas de mi pueblo; por la mañana he cumplido a rajatabla un anuncio de la televisión local en el que aparecen varias personas diciendo "yo soy turismo...".
Una pareja que provenía de Jaén me ha preguntado dónde estaba el Huerto del Cura y, no contenta con indicarle su ubicación, le he aconsejado ver los museos de la Festa, del Palmeral, el MAHE, el Centro de Visitantes y como no, el parque municipal.
Después del no visto y apenas oido pregón por la pitada de fondo, me he ido al "sopar de cabaset" de mi barrio y !!! sorpresa!!! no solo no pueden pasar los coches por las calles, las personas que utilizamos la silla de ruedas para deambular tampoco podemos pasar.
Las vallas están cogidas con cadenas al suelo, de tal forma que no permiten poder separarlas de la acera el ancho de una silla, como mucho 70 cm.
He llegado a la conclusión de que ya no formo parte del spot televisivo, yo no soy turismo.
Pero tampoco soy ciudadano de pleno derecho, aunque, bién pensado, eso no está hecho así a conciencia, ningún concejal de fiestas, tráfico, seguridad ciudadana o nuestra alcaldesa lo han hecho con mala idea, simplemente, no han caido en ese detalle.
Pues lo siento, señores gobernantes, pero ustedes están ahí no solo para caer en esos "detalles", sino para
"...remover todos los obstáculos que impidan la total inserción social de las personas con discapacidad..."
Léanse la Carta Magana y cumplanla, que para eso han sido elegidos.
No crean que soy tendenciosa y solo he sacado una parte de la valla, ahí está al completo
